Restaurantes y cáterings

Los ingredientes invisibles de una cocina sana
Las aguas residuales generadas en cocinas industriales contienen grasas y aceites que, si se vierten por el desagüe, pueden solidificarse en las tuberías y producir corrosión, atascos y malos olores. Esto compromete los niveles de limpieza e higiene de la cocina, creando un ambiente desagradable y poco seguro.
El primer paso para conseguir una cocina comercial saludable es contar con un sistema eficaz de gestión de aguas residuales. Para su diseño e implementación, se deben tener en cuenta aspectos que faciliten su limpieza y mantenimiento y que optimicen su productividad.
Una cocina bien diseñada con un sistema eficaz para drenar y tratar las aguas residuales beneficia no solo a trabajadores y clientes, sino también al medio ambiente. Para ello, ACO ofrece soluciones y componentes aptos para cumplir con las necesidades presentes en todo tipo de proyecto.
Doble enfoque de la separación de grasas
Los distintos tipos y tamaños de cocinas comerciales requieren diferentes soluciones para llevar a cabo las tareas de separación de grasas. La elección del separador de grasas a instalar dependerá de una serie de criterios clave como la capacidad de la cocina, el tipo de alimentos que allí se procesen, los equipos instalados para procesar los alimentos, el contenido de las aguas residuales y la densidad de las grasas.
Los separadores de grasas de ACO no solo protegen desagües y redes públicas de alcantarillado, sino que van más allá y adoptan un enfoque doble con el objetivo de proteger también las instalaciones de los edificios.
Sistemas fáciles de limpiar
El sistema de drenaje instalado en una cocina comercial no debe comprometer su facilidad de limpieza y mantenimiento ni la capacidad del caudal para no afectar a su operatividad ni poner en riesgo la seguridad de los alimentos.
La gama de productos de ACO para el drenaje de superficies ofrece soluciones personalizables que se adaptan perfectamente a su instalación en diferentes tipos de cocinas comerciales. Esta flexibilidad viene dada por la elección de los componentes que mejor se ajustan a los materiales y características de estos espacios, así como a los requerimientos de mantenimiento y al presupuesto disponible.